Hace unos años atrás se hablaba de evitar el consumo de huevos, especialmente la yema, debido a su alto contenido de colesterol y por ende su relación con enfermedades del corazón.
En este post quiero defender a este alimento delicioso, nutritivo y accesible y así despejar de una vez por todas las dudas alrededor del huevo!
El huevo, un alimento alto en nutrientes
El mito persistente de que el colesterol podía estar relacionado con cardiopatías asustó a muchos de los que consumíamos huevos de forma regular.
La realidad es que no hay ningún estudio hasta el momento que establezca una relación entre el consumo de huevo y las enfermedades del corazón.
Los huevos son de los alimentos más ricos en nutrientes disponibles. Un solo huevo proporciona 13 nutrientes esenciales, todos contenidos en la yema (es correcto, la yema posee más nutrientes que la clara de huevo).
Los huevos son una excelente fuente de vitaminas B, las cuales son esenciales en el proceso de convertir los alimentos en energía, la función cognitiva, los estados de ánimo, entre otros.
Son fuente de vitamina A, esencial para el crecimiento y desarrollo. Vitamina E que nos protege de enfermedades del corazón y algunos tipos de cáncer, también contienen Vitamina D para la absorción de minerales y la salud de nuestros huesos.
Los huevos son ricos en yodo para apoyar la función tiroidea y fósforo para la salud de huesos y dientes.
También son una buena fuente de antioxidantes para proteger nuestros ojos.
Diferentes tipos de huevos
Sin duda los huevos más populares son los de gallina, pero también son deliciosos los de pata, pava y codorniz.
Cinco huevos de codorniz tienen casi los mismos nutrientes que un huevo de gallina, mientras que un huevo de pava contiene casi el doble de nutrientes.
Los huevos que aparecen en la foto de este artículo son de gallina (el de la derecha) y de pava (el de la izquierda).
Consumir unos 3 huevos de gallina al día puede proveernos una gran variedad de nutrientes, mucho mejor que varios suplementos multivitamínicos que encontramos en el mercado.
Si puedes conseguir tus huevos de patio mejor aún, ya que muchos de los huevos comerciales contienen hormonas y un alto contenido de omegas -6, los cuales en exceso pueden ser pro inflamatorios.
Espero que con esta información te animes a comer más huevos en tu alimentación regular y si le tenías miedo a la yema, que ahora puedas disfrutarla sin culpa. ¡Buen Provecho!
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